CANTO XXV DE LA COMEDIA HUMANA
(Corrupción)
Ángeles y demonios vi en humanos
En oscuros instantes misteriosos
Seres extraños y sobrehumanos.
Corrupción corrupta del corruptino:
--Soy tormento de la justicia ciega
Y que a todos con mentiras arruino--.
Vi la corrupción en el Purgatorio,
Los jueces enjuiciaban a este monstruo
Con exorcismo y rezos de oratorio.
Monstruo de inimaginable cabezas
De inmensos tentáculos por doquier,
Mordiendo con las más rara rarezas.
Vi que en este mar todos zozobraban,
Mientras se hundía el barco en alta mar.
Angustiados maldiciendo lloraban.
Al respirar en su nuca sufrían…
¡Oh tentación de tentaciones mirad!
Los males, del humano se reían.
La honestidad frente al mal moría.
Eran ellas los mismos con las mismas.
La humanidad al abismo caía.
Purgatorio: vi en infinita filas
A los feos corruptos angustiados
Como brujas quebradas en la pira.
El cuadro dantesco de la Edad Media.
La corrupción la rondaba la muerte
El infierno doloroso la asedia.
¡Ayees!, se escuchaban entre tinieblas
De imaginar el juzgar de los jueces,
Tú, que frente al pecado y juicio tiemblas.
Ella que por el pecado huía,
Buscaba al Salvador que no encontraba
Encontrando el submundo donde sufría.
Corrupto marcado igual parecía
Atravesando el camino de espinas.
Lapidado en el infierno moría.
Oscuro principio de oculta cofradía,
Los corruptinos, de la oculta secta
Con su vampiresa filosofía.
Corrupto marcado en la frente, olía
Caminos heridos y corrompidos
Lapidado en el infierno moría
Pero quién les endulzaba el infierno
Era Satanás seductor como el oro
Con cara de ángel y de mal eterno.
Aída también cayó al acantilado,
Entrenada escuela del ángel negro
De marcado negro y diente afilado.
Muchos Pedros cayeron al abismo
Como caen las manzanas podridas
Gravitadas por la acción del cinismo,
Eran como el más maduro aguacate
Engañoso y por todos manoseado
Con su corazón negro de remate.
Como el fusil corrupto de los niños
Entrenados en la escuela de sangre
Del mundo de vencejos desaliños.
Como gran soplo que a la llama inflama
En el pasto seco de la pradera
Y el cuerpo sin salida yace en flama.
Boba por la bicoca y más bicoca
Nadia: de esconder entre cielo y tierra
Con cártel temprano en gigante boca.
Ángeles negros de la humana triste.
Temprano que tarde caerán ángeles
Del libre albedrío que en él se insiste.
Con absurdo siempre del más absurdo
De humana conducta por su ironía.
Humano absurdo de su lado burdo:
Tanta ironía cuando la ironía
Vio clamando a la infeliz felonía
Mientras tanto que en sus ojos llovía,
Barca en lluvia siempre se enfrentaría,
Una denegro con otra de blanco
En mar picado que el absurdo cría.
Luego esa bicoca por más bicoca
Que rectitud por una mente coca
Fue insondable sorpresa de una boca.
Mirad maestro están aquí en la tierra
Con fama negra va de boca en boca
De lujo en lujo sin pasarles la perra.
En el sepulcro unos y en tierra otros
Hasta no lograrlo ahí estará la perra
Con su secreto abuso entre vosotros.
Discípulo es la tierra donde habita,
Campea y como interminable esfera
Bola de nieve que crece y orbita.
El planeta tierra es un paraíso
Paraíso fiscal de incubadora
Do se incuba la aguja como erizo.
Ilusión y oropel de ese mundo
Que sueña y explora su utopía
Que no levita en explotar profundo,
Como natural es el terremoto
Tan peligroso para el humano
También el natural maremoto.
Diversidad de diverso es el mundo
Va y viene la Norma ella siempre bella
y el mundo siempre con verso iracundo.
El poeta cantó cantos diversos
Y lo vi en el purgatorio, en el cielo
También en el infierno cantó en versos.
Pero en la tierra más cantó y cantaba
Al mirar más corrompido al humano
Que más perdido en el pecado estaba.
Belleza de la tierra como causa
Y consecuencia de lo bueno y malo
Resiliencia humana de causa en pausa.
Frente a la corrupción con resiliencia,
Gigante tierra de supervivientes
Que retumba con gigantesca ciencia.
Tierra corrupta, viciosa y de belleza
Tierra de olvido, amarga y de esperanza
Tierra de agua, muerte y de sutileza.
Tierra de guerra, perdón y alegría
Tierra de odio, traición y amorosa
Tierra en climática ventisque ría.
Del odio odiosa toda corrupción
Que se mimetiza como serpiente
Y al zarpazo envenena una nación.
¡Oh!, tierra de querencia y armonía
Tus hijos con dolor siempre has parido
Que en tu seno cubres con alegría
Y a vece tú en desamor la has herido.
R. Escandón. 20. 01. 20. Medellín. Antioquia. Colombia